La salud intestinal es clave para maximizar el valor y la eficiencia de la producción

Ilustración generada por computadora de bacterias intestinales.

Un tracto gastrointestinal saludable y funcional que defienda contra los patógenos y sus toxinas es esencial para lograr el máximo rendimiento en aves de corral y ganado. Las enfermedades intestinales en la producción de proteínas causan miles de millones de dólares en pérdidas económicas cada año, por lo que encontrar métodos efectivos para proteger proactivamente el medio ambiente intestinal es una tarea importante para los productores, particularmente para los sistemas libres de antibióticos (ABF). Comprender cómo la función intestinal afecta la eficiencia de la producción y la salud general de las aves de corral y el ganado es el primer paso para encontrar soluciones para apoyar un ambiente intestinal saludable. Vea nuestro video animado educativo aquí o lea a continuación para obtener más información.

Función intestinal y anatomía

Los intestinos están cubiertos de estructuras en forma de dedos llamadas vellosidades que aumentan el área de superficie del intestino y cuya función principal es la absorción de nutrientes (Figura 1). Las vellosidades y el tejido subyacente también son el hogar de un gran número de células inmunes. El revestimiento de las vellosidades son enterocitos: células que utilizan microvellosidades para absorber nutrientes de la luz intestinal en el sistema circulatorio.

Entre los enterocitos hay uniones estrechas que regulan la permeabilidad intestinal. Los enterocitos forman la pared intestinal de una célula de espesor que, junto con una cubierta de moco, actúan como una barrera entre el contenido de lúmenes y el resto del cuerpo. Para funcionar correctamente, los enterocitos deben estar sanos, adecuadamente nutridos y energizados.

Ilustración de un intestino sano.
Figura 1: Anatomía de un intestino sano

Defiéndase contra la invasión de patógenos

El intestino hace más que ayudar a la digestión y la absorción; actúa como un guardián, protegiendo el cuerpo contra patógenos dañinos y sus toxinas. El moco y los enterocitos que recubren el intestino forman una barrera y son la primera línea de defensa contra el entorno externo. Por lo tanto, si el ambiente intestinal no es saludable y no funciona correctamente, puede tener un impacto negativo en múltiples sistemas del cuerpo.

En entornos de producción normales, las aves y el ganado están expuestos a patógenos a través de la alimentación y el medio ambiente. Algunos patógenos son destruidos por el ambiente ácido del estómago; sin embargo, algunos sobreviven y se establecen dentro de la microbiota del intestino delgado. Un ambiente intestinal desequilibrado puede resultar en un crecimiento excesivo de patógenos, lo que desencadena la respuesta que puede conducir a una enfermedad entérica (por ejemplo, enteritis necrótica) o impide que los animales alcancen su máximo potencial de producción.

Una vez establecidas, las cepas virulentas de bacterias pueden secretar toxinas potentes durante el rápido crecimiento celular y el metabolismo. Las toxinas similares a los lípidos también pueden liberarse de las paredes celulares bacterianas cuando las bacterias mueren, ya sea de forma natural, por el uso de antibióticos o debido a la respuesta inmune. Las toxinas interrumpen las uniones estrechas y desencadenan la muerte de los enterocitos, causando la ruptura de la barrera intestinal protectora (Figura 2). La ruptura de la barrera impide la digestión y adsorción de nutrientes, limita la función de los órganos y permite que las toxinas entren en el sistema circulatorio.

Ilustración de un intestino poco saludable.
Figura 2: Una barrera intestinal debilitada donde las bacterias y las toxinas han superado los mecanismos de defensa celular y los enterocitos debilitados no pueden funcionar de manera efectiva.

Soluciones naturales para mantener la salud intestinal

Con el aumento de los sistemas de producción libres de antibióticos, mantener un ambiente intestinal saludable ahora requiere un método natural para reducir los niveles de patógenos en el ambiente intestinal. Las formulaciones patentadas a base de minerales naturales de Amlan, Varium® para aves de corral y NeoPrime® para cerdos, modifican el ambiente intestinal al reducir las bacterias patógenas y sus toxinas, estimulando la función inmune innata y energizando los enterocitos para crear una fuerte barrera intestinal.

Cuando Se agregan Varium o NeoPrime a las dietas, los patógenos y sus toxinas en la luz intestinal están unidos por la tecnología mineral patentada y activada térmicamente de Amlan. Los patógenos unidos se presentan de forma segura al sistema inmunitario a través de las células del pliegue micropector intestinal (M). Las células inmunes procesan estos antígenos y crean más células inmunes para defenderse naturalmente contra la invasión.

Al presentar los antígenos unidos de forma segura al sistema inmunológico antes de que se vea abrumado por altos niveles de desafío patógeno, el sistema inmunológico se activa térmicamente y se prepara para montar una defensa adecuada. Después de que se reduce el desafío patógeno o de toxinas, el fortalecimiento de las células epiteliales que recubren el tracto intestinal y el mantenimiento de patógenos y toxinas fuera del cuerpo ayuda a proporcionar protección adicional.

Mantener un ambiente intestinal saludable es clave para ayudar al ganado y las aves de corral a alcanzar su máximo potencial. Amlan puede ayudar, con tecnología mineral de próxima generación que reduce los desafíos patógenos, fortalece la barrera intestinal y prepara el sistema inmunológico para defenderse naturalmente contra las enfermedades. Para obtener más información, visite https://amlan.com/products/

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